Cuando todo iba bien, cuando la promesa de 'para siempre' seguía ahí.
Era entonces cuando creías saberlo todo, y en realidad no sabías nada.
Decidiste ocultar a tu verdadero yo para que no te dieran de lado, y te quedaste la tú real solo para unos pocos.
Era entonces cuando pensabas que tu amistad era algo para ellos, cuando parecías importarles.
Entonces pasó: te diste cuenta de que era demasiado bonito, regresaste de nuevo al mundo real.
Tu sonrisa se apagó durante unos instantes.Pero recordaste.
Hay mucha gente; están los que no valen nada, y los que lo son todo.
Preferí quedarme con los que lo son todo. Y aquí estoy, riendo de nuevo, siendo yo misma.
Yo misma y nadie más. Junto a ellos. Junto a lo que más quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario